¿Somos Templo de Dios?

Conmemorar la construcción del que es considerado Templo Madre de toda la Diócesis es una invitación a sentirnos como piedras vivas y templos de Dios en medio del mundo.

Bajo estas palabras de san Pablo; que hacen referencia al lema del Año Jubilar con motivo de los 800 años de nuestra Catedral, el pasado domingo nuestros jóvenes profundizaron en cómo conseguir el Jubileo.

¿Jubileo es jubilarse?

Quizá una pregunta un tanto extraña, pero no tan fuera de onda si llegas a la conclusión de que ciertos acontecimientos de nuestra vida, son motivo de celebración y alegría y por los que no necesariamente tienen que pasar 50 años, como nos cuenta la Biblia en el Libro del Levítico.

Entonces… ¿Somos Templo de Dios?

Bajo esta dinámica, nuestros chicos y chicas debían escribir en unas piezas de puzle que simulaban las piedras de la Catedral como se esculpían como cristianos.

Una propuesta un tanto complicada, pero como buenos albañiles consiguieron construir la Catedral y como buenos cristianos lograron sentir más cerca a Dios y alcanzar ese ansiado jubileo.