Entrevista a Sor Fátima del Corazón de Jesús
El próximo domingo día 2 de febrero, se celebra la Jornada Mundial de la Vida Consagrada.
Ese día profesa votos temporales; «Sor Fátima del Corazón de Jesús»; religiosa del Convento de las Agustinas de la Madre de Dios.
Se nos invita a participar en la misa de las 11:30h. que tendrá lugar en la iglesia de las Agustinas para festejar tan entrañable acontecimiento.
Antes de ese día y robándola un ratito de su tiempo hemos estado con ella para que nos cuente qué significa dar este paso tan importante en su fe y en toda su vida.
Sor Fátima del Corazón de Jesús
¿Cuál es tu nombre? ¿De dónde eres? ¿Cuántos años llevas de religiosa?
Mi nombre es Esmeralda Romero Sandoval, aunque en la vida religiosa escogí el nombre de Fátima del Corazón de Jesús.
Soy de México y llevo en España once años.
Antes de ser destinada en Burgos, ¿En qué lugares ha estado? ¿Cuánto tiempo lleva en esta comunidad?
Antes de llegar a Burgos, estuve destinada en dos comunidades de Agustinas: en Valdepeñas (Ciudad Real) y en Huelva.
En esta comunidad llevó casi catorce meses, desde diciembre del 2023.
Yendo más allá y llenos de curiosidad, nos encantaría saber ¿Cómo fue su vocación? ¿Le costó mucho tomar la decisión? ¿Cómo fue la reacción de su familia?
Creo que el don de la vocación el Señor me lo dio desde pequeña. Desde niña yo sentía la inclinación, pero a veces la vida nos lleva por otros caminos y hay que esperar el momento, para poder tomar la decisión y decirle Sí al Señor con un corazón sincero.
No me costó tomar la decisión. Al contrario, lo hice con mucha ilusión.
La reacción de mi familia, al principio, como la de muchas otras, fue de molestia y desconcierto. Era la única chica y rompía sus ilusiones de un futuro diferente. Les fue difícil aceptarlo. Pero el tiempo pasa y hoy están contentos de tener una hija en la vida religiosa.
Todos sabemos que existe un buen número de congregaciones tanto de vida activa como de clausura. ¿Qué le llevó a elegir a las Agustinas de la Madre de Dios?
Existe un sinfín de carismas en la Iglesia, cada uno con su propio don y Apostolado.
Yo no las elegí, el Señor me las puso en el camino y ellas me eligieron a mí.
Puede explicarnos cómo es el día a día dentro del convento. ¿Cómo se desarrolla un día cualquiera y cuáles son los momentos más importantes?
El día a día en el convento es de lo más normal pero siguiendo unos horarios de levantada, rezos, trabajo, comidas, vida en comunidad y tiempo libre. Muchos días es hacer las cosas de siempre. Lo importante en el día a día es como se viven las pequeñas cosas que se van presentando.
Para mi los momentos más importantes son, como comtemplativa, la oración y la liturgia de las horas; y, como agustina, la vida en comunidad.
El próximo domingo día 2 de febrero, se celebra la Jornada Mundial de la Vida Consagrada. Ese día profesa votos temporales.
¿Puede explicarnos la diferencia entre votos temporales y votos perpetuos?
Los votos temporales son solo por un determinado tiempo que puede variar en años, dependiendo de la comunidad y de la misma persona en su proceso para dar un Sí perpetuo.
Los votos perpetuos son para siempre.
¿Cómo se siente? ¿Está nerviosa? ¿A qué se compromete a la hora de hacer esos votos?
Estoy muy nerviosa y muy ilusionada.
Es un paso más en mi proceso personal de donación, de entrega al Señor y a la comunidad. Es intentar ser fiel a lo que voy a hacer.
Hoy en día todos sabemos que en la Iglesia hay una gran falta de vocaciones. ¿A qué cree que se puede deber? ¿Hay esperanza?
Yo creo que no solo dentro de la Iglesia. En general hay una gran crisis de vocaciones por lo que quieres hacer.
El mundo está desquebrajado no solo en lo religioso sino en los valores y moralmente. Creo que ahí es la base de la falta de pasión y decisión para hacer lo que quieres. El mundo como tal te lleva a ser frio, deshumanizado, no solo en lo que ves y oyes sino hasta en las propias experiencias de la vida. Pero siento que depende mucho de la propia persona el querer ser o dejarse ser por lo externo.
Nunca debemos perder la esperanza. Creo que es una virtud hermosa, que te mantiene alerta y con la capacidad de sorprenderte. No siempre es lo que queremos y esperamos, pero ésta es la luz que nos permite ver con claridad.
Y por último, ¿Qué le diría a los jóvenes que tienen dudas de si orientar su vida hacia la vocación religiosa?
Que no tengan miedo, que se atrevan a dar el paso, que vean y conozcan.
Sé que puede ser difícil porque los jóvenes de ahora son indecisos; pero Dios va mostrando el camino. Estad alerta.